Ismael Nieto González. Árbitro internacional de ajedrez. Jugador, al mismo tiempo, de uno de los clubes más famosos de Sevilla: el club Alekhine de Espartinas (aunque durante la entrevista he tenido la oportunidad de reactualizarme sobre el panorama del asociacionismo deportivo en mi provincia y se me ha trasladado que el club ha sido reubicado en Mairena del Aljarafe). En esta entrevista se pone de relieve para qué sirve el sistema suizo de competición y para qué se creó. Un formato «regular» que sirve para encontrar al mejor jugador en enfrentamientos cara a cada (1vs1) donde no puede llevarse a cabo un sistema Liga o Round Robin (liga a una vuelta) con motivo de la escasez de tiempo o debido al gran número de participantes.
El sistema suizo permite encontrar un formato parecido a las eliminatorias inserto dentro de una competición en la que no solo no se elimina a nadie sino que, además, va enfrentando a los jugadores por igualdad de actuación durante el torneo.
Es el mejor sistema para torneos de 1 o 2 días con muchos participantes y hay que hacer buen uso de él: confeccionar un ránking inicial según el ráting (nivel) de los participantes, hay que calcular el número de rondas necesario para encontrar a un campeón y hay que modelar los sistemas de tie break o desempate teniendo en cuenta las características de quienes van a disputar la competición.
Los organizadores deben tener en cuenta que este sistema, sin mezclar con otros formatos de emparejamientos, ya sirve para alcanzar un jugador campeón del torneo sin necesidad de continuar con más fases dentro de la competición.
Carcassonne es un juego sin eliminaciones que necesita un sistema de competición sin eliminaciones.
El sistema suizo se creó para el ajedrez: que es un juego a 2 colores enfrentando a 2 oponentes. El Carcassonne competitivo 1vs1 sigue la misma estela de enfrentamiento, teniendo en cuenta que se adapta perfectamente al sistema suizo incluso en la cuestión de la necesidad de establecer al jugador que da comienzo a la partida, como si del jugador que juega con blancas (en ajedrez) se tratara.
Mi intención con esta entrevista es hacer pensar a los directores técnicos de los campeonatos nacionales y del mundial, y a los organizadores de estos eventos (las distribuidoras y editoriales que venden el juego) para focalizar este tipo de competiciones NO en una fase concreta (una final televisada) sino en un torneo que congrega a los mejores del mundo para conseguir un torneo fuerte y con el nivel más potente: los mejores exponentes de cada país, que son los campeones de los formatos de suizo puro, sin eliminatorias.